Tras rescatar los efectos nocivos de la pólvora sonora; tanto en personas, animales más; el cantón de Curridabat prohibió el uso de la misma dentro del cantón.
De esta manera, el acuerdo del Concejo Municipal, aconsejó a los comerciantes a buscar nuevas tecnologías como reemplazo.
"El acuerdo no afecta a los patentados que ya poseen licencia comercial para la venta de este tipo de pirotecnia; sin embargo, hace un llamado a los vendedores a comercializar elementos no contaminantes, como juegos de luces, drones y láser".
La decisión fue respaldada con informes de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y estudios e investigaciones de diferentes organizaciones relacionadas con los trastornos del espectro autista (TEA).
Así mismo, las mujeres embarazadas, adultos mayores, enfermos cardíacos, y demás personas animales sufren afectaciones con el uso de la pólvora.
"La hipersensibilidad auditiva es la razón que impide a los niños que padecen de TEA a disfrutar de los fuegos pirotécnicos. Miedo, ansiedad, estrés e ira son algunos de los síntomas que experimentan los niños que sufren de TEA al escuchar el estruendo de la pirotécnica y de la pólvora", destaca el respectivo acuerdo.
Según la OMS, los fuegos artificiales pueden generar una intensidad sonora excediendo los recomendados.
"Diversos estudios realizados, fundamentalmente en el área de la medicina ocupacional, han demostrado que los ruidos de alta intensidad, y de manera repetida, pueden generar pérdida de audición en los fetos", agrega el acuerdo.
De acuerdo con estas repercusiones negativas, el Concejo Municipal de Curridabat analizó todos los datos y concluyó la prohibición del uso de la pólvora sonora.