RubenTop Feb 2022

El número de personas jóvenes que pierden la vida producto de accidentes de tránsito en Costa Rica es de alerta roja para la sociedad, según comunicó hoy martes el Ministerio de Obras Públicas y Transportes el 2022 dejó 484 decesos en carretera, de ellos, la mayoría eran personas entre los 21 y los 30 años, 130 casos en total, el 27% de la suma. Otros 122 tenían entre 31 y 40 años, personas relativamente jóvenes, también.

De esta manera, el 52% de los fallecidos en carretera eran personas de poca edad, en una fase productiva de sus vidas lo que, además del luto en sus familias, implicaría una
afectación económica a sus dependientes, según el caso.


Otras 32 personas tenían entre 11 y 20 años, al momento del percance que les cobró la vida, el año pasado.


“Desde todo punto de vista, es una tragedia cualquier fallecido en carretera, pero si a eso le agregamos que son personas muy jóvenes, duele muchísimo más, porque son
personas que apenas están empezando su vida adulta, en el caso de los de 21 a 30 años; lamentablemente, si bien habría que analizar cada accidente, en ocasiones, esa
misma juventud los lleva a cometer algunas imprudencias que pueden provocar accidentes. De igual manera, tenemos a los de 31 a 40 años, personas todavía jóvenes,
consolidando proyectos profesionales y familiares, así que el impacto no solo es el dolor en su familia, sino las implicaciones económicas de que ese padre, esa madre o hijo o hija que aportaban al hogar, ya no esté, así que el drama se extiende en otros aspectos”, analizó Alexander Solano Quirós, director de la Policía de Tránsito.


Por otro lado, la mayoría de los accidentes de las personas que perdieron la vida en el sitio, ocurrieron entre las 6 de la tarde y las 12 de la noche, a saber, un total de 159 de
los 484 decesos; a ellos se suman 148 que perdieron la vida entre la medianoche y las 6 de la mañana. Así, el 64% de los fallecidos murieron en las horas de la noche y
madrugada.


Para las autoridades de Tránsito, estas cifras son muy reveladoras, porque dejan en evidencia que las actividades nocturnas, como salir de fiesta o trasladarse de paseo
pueden ser factores que aumenten el riesgo de un percance, más cuando se suma el exceso de velocidad, el alcohol al volante o el sueño.


“Solo en diciembre, de los 48 decesos, 16 ocurrieron en la noche, antes de las 12 y otros 14 ocurrieron en la madrugada. Si los sumamos, tenemos que el 63% del total perdieron la vida en esas horas nocturnas, muy similar al 64% que se dio durante todo el año.


Lamentablemente, la poca cantidad de vehículos, en las noches y madrugadas, permite a muchos abusar de la velocidad, por ejemplo, y de ahí vienen algunas las fatalidades”,
acotó Solano.
A propósito del ejemplo dado por el funcionario, el exceso de velocidad fue, el año pasado, la principal causa de muerte en carretera, con 192 vidas perdidas relacionadas
con este riesgo, superando por mucho a la invasión de carril, que se ubicó de segunda en la lista, con 87 fatalidades.


Aunque obvias, las recomendaciones de las autoridades siguen siendo las mismas, como no abusar de la velocidad, no distraerse con el celular, mientras conducen; en este
mes de vacaciones escolares, estacionar el vehículo, si sienten sueño, camino o de regreso de un paseo, no conducir bajo los efectos del alcohol, evitar conducir de noche
por rutas que no conocen bien y como peatones y ciclistas hacerse visibles ante los conductores.